lunes, 21 de septiembre de 2015

Factores principales en la atención al cliente.


Diferenciación:

Podemos considerar que una atención al cliente que mejore día a día se puede convertir en un elemento esencial de la gestión estratégica de nuestra organización, un aspecto diferencial que ofrecemos al posible comprador y que nos diferencia de forma positiva con respecto a la competencia.

Descubrir las necesidades y expectativas del consumidor:

Pensemos que nuestro servicio o producto es el mejor del mundo. Nosotros lo sabemos, y también creemos que la atención dispensada es única, perfecta, y que todo lo que hacemos es inigualable. Pensemos ahora que el cliente, es decir, la persona que es el centro de todo lo que hacemos, no percibe igual lo que nosotros pensamos, o quizás espera un servicio o atención diferentes.
Vamos a tener muy en cuenta la figura del cliente. Todo lo que podamos saber sobre él será bienvenido, ya que ese conocimiento nos evitará grandes fracasos y nos dará la oportunidad de mejorar de forma continuada.

Mejora continua y flexibilidad:

No pensemos que somos los únicos que quieren mejorar en la atención al cliente y la calidad. Las empresas que piensan sobrevivir dentro de la competencia actual, hacen lo mismo. Por lo tanto la intención no es solo ofrecer una buena atención al cliente, hemos de procurar dar la mejor, para lo que es necesario que nos adaptemos continuamente a las diversas situaciones, lo que obligará a aumentar la flexibilidad de la organización en la que desempeñamos nuestra labor.

El trabajo y el cliente, lo esencial:

No basta con orientar nuestro esfuerzo hacia el cliente o hacia el trabajo, es necesario saber estar con actuaciones que valoren aspectos humanos, y saber hacer, lo que implica los aspectos más técnicos del trabajo. Hay que desarrollar ambas orientaciones de manera eficiente.

Atención al cliente = fidelización:

La infidelidad se ha convertido en un problema para muchas empresas, que ven como sus clientes les traicionan adquiriendo productos o servicios de la competencia. Enfocar nuestra atención al cliente como un camino para fidelizar, puede hacer que corrijamos este problema. La fidelización se conseguirá aportando nuevos valores a nuestros productos o servicios. Nuestra intención es siempre cubrir las necesidades del cliente, satisfacerle lo máximo posible mediante la creatividad, la innovación o la personalización. Buscando valores que sean interesantes para los consumidores nos diferenciará, ofreciéndonos ventajas muy interesantes, como la fidelización.   

Estos factores han de ser muy tenidos en cuenta a la hora de atender correctamente a un cliente, ya que nos permitirán que todo el proceso se desarrolle de manera correcta y adecuada.